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Déboras Edificadoras del Reino

Me convertí en mariposa

Las cosas que el Señor ha hecho conmigo tengo que testificarla, ya que vivía una vida llena de mentiras y engaños, dejándome usar por el enemigo primeramente. Duré 13 años de mi vida con una pareja, la cual tenía que mantener con dinero, fue tan así que esa persona me llevó a cometer varios abortos. Me sentía tan vacía que me fui a vivir fuera del país; tenía tanta ambición que llegué a vender mi propio cuerpo; la vida no tenía sentido, sólo pensaba en el dinero. Un día estaba sufriendo ataques del enemigo, tentándome para que cayera en esa vida nuevamente, pero Dios estaba conmigo fortaleciéndome. Un día me acerqué a mi madre espiritual, diciéndole que tenía que irme y ella me dijo esto: Apocalipsis 21:7-8, entre tantas palabras que hay en esos versículos uno me marcó (cobarde). Y escuchaba esa misma voz donde quiera que estuviera (cobarde). Hace 3 años que el Señor me sacó de ese país, trayéndome a una casa donde mora su Santo Espíritu, Iglesia Monte de Dios, dándome unos pastores tan maravillosos, que hoy puedo decir que los amo y que cada día en mis oraciones están presente y le pido a nuestro Dios que los bendiga y que cada día los llene de Su gloria.

Yo era un gusano que el Señor le dio una oportunidad de convertirse en una mariposa, con el respaldo de mi madre, me he dejado guiar para ganar la vida eterna convirtiéndome en una verdadera Débora, que hoy se prepara para la batalla.

Gracias, primeramente a nuestro Señor Jesucristo por su gran amor. Montserrat, la madre que nunca tuve. Quiero que sepa, que aunque que sé que usted sabe que la amo, cuando la abrazo, su amor es tan lindo, que me hace feliz. Gracias, quiero siempre servirle y estar a su lado; gracias por enseñarme a ganar y obtener la victoria; gracias por enseñarme la luz divina.

La Amo Mamá,
Angely

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