
Génesis 2:7
7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
La expectativa de Dios es que usted sea cada día más, más espiritual.
Cuando Jesús fundó su iglesia, esa iglesia primitiva lo que la identificó fue el advenimiento del Espíritu Santo sobre esos 120, lo que justificó a Jesús como el hijo de Dios fue cuando Jesús se bautizó y vino el Espíritu Santo sobre él.
El Espíritu de Dios es el Espíritu Santo y ha estado siempre desde la creación y sobre toda nuestra vida.
El hombre siempre ha buscado la dimensión espiritual, pero de una manera distorsionada y no entiende que la fuente del mundo espiritual es Dios y solamente a través del Espíritu Santo, no hay otra fuente.
Job 32:8
8 Ciertamente espíritu hay en el hombre, Y el soplo del Omnipotente le hace que entienda.
Por eso es que tenemos que tener una relación con el Espíritu Santo para poder entender a Dios, para poder conocer a Dios, para poder entender y que se nos revele la palabra que Dios tiene para nosotros.
Dentro de usted hay tres entidades:
1) Usted es un hombre espiritual, usted tiene un Espíritu dentro.
2) El Espíritu de Dios está en un usted.
Ezequiel 36:26
26 Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. 27 Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.
3) Tu alma, puede ser tu mejor amigo, o tu peor enemigo.
El hombre espiritual obligatoriamente necesita tener su alma, porque hay cosas de Dios que se van a manifestar a través de tu alma, pero tu alma está sujeta al Espíritu, tu alma no puede estar sin un jefe, en otras palabras tu alma no puede ser tu jefe.
El hombre aunque sea espiritual tiene que tener su alma en control, pero ese control viene por el Espíritu, en otras palabras, su alma no puede andar suelta, tu alma tiene que tener un control, tiene que estar sujeta a tu espíritu, porque cuando tu Espíritu sujeta a tu alma, automáticamente tu cuerpo está sujeta a tu Espíritu.
Salmos 25:20
20 Guarda mi alma, y líbrame; No sea yo avergonzado, porque en ti confié.
Dios necesita que usted renueve su Espíritu.
Hasta que tú no comiences a restaurar tu espíritu y a revivir tu espíritu, usted no entrará en la dimensión de ser una persona espiritual.
1 Corintios 6:19
19 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
Romanos 8:19
19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
Para usted ser hijo de Dios, tiene que ser a través del espíritu.
Lo paternal de Dios es por el espíritu.
Romanos 8:14-15
14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos de Dios. 15 Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!
Somos pámpanos en la vi, cuando estamos en el espíritu y, tu crecimiento como pámpano te la da la savia del espíritu.
El Espíritu Santo está lleno de dones, de misterios, de dones, y todos son:
1) Para renovar tú espíritu.
Lo que renovó el espíritu de los 120 fue el Espíritu Santo, por eso usted tiene que anhelar al Espíritu Santo para que le renueve su espíritu.
2) Para glorificar a Cristo
3) Para revelarnos a Cristo.
Porque cada vez que tu espíritu es reavivado se te manifiesta Cristo.
4) Para acercarnos hacia la verdad.
Cada don que el Espíritu Santo activa en usted, es don de arma de guerra.
Efesios 6:12
12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.
Mateo 16:18
18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
La iglesia tiene que renovar su espíritu.
Esa es el arma más poderosa que tiene el creyente, la renovación de su espíritu por medio del Espíritu Santo.
Cuando Dios despierta un don, automáticamente va a llamar al talento.
Cuando el Espíritu de Dios te renueva, cuando el Espíritu de Dios renueva tu espíritu, Dios comienza a despertarte los dones, cosas que no sabías hacer, las empiezas a hacer, ideas creativas que no tenías te la empieza a dar y automáticamente los dones se despiertan, se te empiezan a acercar los talentos es como un imán, entonces el don y el talento es lo que te hace irresistible, el talento y el don es lo que te hace diferente, el talento y el don es lo que hace que la gente te siga, el talento y el don es lo gente anda buscando.
Los dones son como un imán atrae los talentos, por eso tu talento tiene que estar debajo de tu don, tu talento tiene que estar sujeto al don.
Juan 16:13-15
13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. 14 Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. 15 Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.
La palabra no es un libro, es la mente de Dios.
El espíritu Santo está sujeto a Jesús.
Cuando su espíritu se despierta automáticamente, usted empieza a glorificar a Jesús.
El Espíritu Santo tiene todas las soluciones.
Cada don que el Espíritu Santo activa en ti, es un arma de guerra, nuestra lucha no es contra carne ni sangre.
Salmos 42:5
5 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío.
Ezequiel 18:4
4 He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá.
Renovar tu espíritu te capacita para servirle a Dios.
1 Timoteo 4:11-16
11 Esto manda y enseña. 12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. 13 Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza. 14 No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio. 15 Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. 16 Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.
2 Timoteo 1:6-9
6 Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. 7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, 9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos.

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